Cuando rediseñé mi huerto la primavera pasada, sabía que quería dos cosas: camas elevadas y muchas estructuras verticales, incluidos túneles para judías. La horticultura vertical permite un uso muy eficiente del espacio, ayuda a prevenir problemas de insectos y enfermedades y añade belleza al huerto. Además, las estructuras fáciles de construir, como los túneles para judías, ¡son muy divertidas!

Sin embargo, hubo algunos obstáculos en el camino. El mayor problema fue encontrar el material elegido. Podría haber optado por arcos de jardín prefabricados, pero buscaba algo más rústico. Mi plan inicial era formar los túneles a partir de paneles de ganado de 16 pies de largo por 4 pies de ancho, que podrían doblarse sobre los espacios entre mis camas elevadas para hacer un arco. Proporcionan un fuerte soporte parahortalizas trepadoras como judías y pepinos, pero también son mucho más baratas que los enrejados y cenadores más elaborados... o eso creía yo.

A finales de julio, los túneles estaban cubiertos de enredaderas de judías.

Huerto vertical: construcción de túneles para judías:

Cuando estuve listo para montar los túneles, llamé a una docena de tiendas de suministros agrícolas, de construcción y jardinería de mi provincia, pero sólo encontré una que ofrecía los paneles a 140 $ cada uno. Tampoco hacían entregas a domicilio y tendría que tener en cuenta el coste del alquiler de un camión para recogerlos. Con cuatro túneles en mente, eso me costaría 560 $, más impuestos y transporte. Después de todo, no era tan barato.

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Con esa idea desechada, empecé a buscar otros materiales que pudieran ser reciclados para el cultivo vertical de hortalizas. Al final, me decidí por los paneles de malla reforzada con hormigón de 8 pies de largo por 4 pies de ancho que he utilizado como espalderas durante años. Además, ¡sólo costaban 8 dólares cada uno! Utilicé dos paneles por túnel, unidos en la parte superior con bridas de cremallera. Para asegurarme de que fueran resistentes, la parte inferior de cada uno de los paneles se fijó a la pared.El panel se fijó a la cama elevada con un listón de madera (véase la foto de abajo).

Las judías verdes están saliendo y se pueden ver las tiras de madera que sujetan los paneles a los arriates elevados.

Al principio, las dos piezas de malla se arqueaban, lo que no era una estructura muy bonita ni robusta. Sabiendo que esto afectaría a su capacidad para soportar cultivos verticales, instalamos separadores de madera. Los listones de madera dieron a cada túnel una forma de arco gótico, ¡que me encanta! Luego se pintaron de un color gris azulado para ayudar a que se mezclaran con el follaje (la madera sin pintar distraía) y rápidamente...En el primer trozo de madera anoté la frase "Muster Point" (punto de reunión), utilizada a menudo por los militares canadienses para designar un lugar de encuentro. ¿Qué mejor lugar para reunirse que el jardín?

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Los esparcidores de madera eran simplemente trozos de madera de desecho que entallamos y pintamos.

La parte divertida: plantar las judías:

Ahora que los túneles estaban listos para las judías, ¡era el momento de plantarlas! Recogí un puñado de variedades de judías: Gold Marie, Emerite, Blauhilde, Fortex, French Gold y Purple Podded Pole. También hice otro túnel para los pepinos, que ahora está asfixiado por las densas enredaderas y los frutos colgantes de variedades como Lemon, Suyo Long y Sikkim.

¿Por qué cultivar un solo tipo de judía de caña, cuando hay tantas variedades hermosas? Éstas son Gold Marie y Blauhilde.

Los túneles de las judías se han convertido en mi lugar sombreado favorito para sentarme a leer. Normalmente, cuando estoy en el jardín, estoy trabajando, regando o haciendo chapuzas. Sentarme bajo los túneles me ha dado una nueva perspectiva del jardín y me permite observar y apreciar realmente las muchas criaturas que visitan el espacio: polinizadores, colibríes, mariposas y más.

¿Practicas algún tipo de horticultura vertical?